Arturo Piña García es Presidente Municipal de Villa de Allende, cargo que ha desempeñado en dos ocasiones anteriores. Asimismo, se ha desempeñado como Diputado Local en el Estado de México en dos ocasiones. Es militante del PRD desde su fundación en la entidad.
Juan Carlos Villarreal: Hola, amigos, hoy nos encontramos con Arturo Piña, presidente municipal de Villa de Allende. Eres profesor, ¿De dónde eres profesor?
Arturo Piña: Estuve en San Simón de La Laguna. Una primaria, director escolar.
Juan Carlos Villarreal: ¿Pero tu primera experiencia frente al grupo fue director?
Arturo Piña: Frente a grupo frente al grupo en primer grado, por cierto.
Juan Carlos Villarreal: ¿En qué año fue?
Arturo Piña: en el 92
Juan Carlos Villarreal: ¿Y egresados de dónde? ¿De qué Normal?
Arturo Piña: Inicié en la Rural de Tenancingo en Tenería del Bachillerato Pedagógico y me vengo a terminar aquí en Valle de Bravo, en la licenciatura en Primaria.
Juan Carlos Villarreal: Y entonces digamos que tu formación de izquierda viene de Tenería, podríamos decir, ¿o hay alguna relación con algún otro personaje?
Arturo Piña: Con mi papá. Él viene del PRI y se integra al Frente Democrático en ese momento y luego participa en el Frente Cardenista y es de los fundadores del PRD de toda la región, fueron los pioneros, junto con otros amigos del partido, y él me pide que nos afiliemos al PRD y dije “mi papá manda, hay que afiliarse”.
Juan Carlos Villarreal: Entonces, en el 87, cuando surge el Frente Democrático y hasta el 92 que tú sales de tu formación de profesor, digamos que esos cinco años estás vinculado a esta formación entre Tenería y el Frente Democrático.
Arturo Piña: 85, porque yo inicié el bachillerato en el 85. En Tenería. Entonces creo que se configuran o ahí se las circunstancias confluyen. Pues porque justamente yo entré en el 85 a Tenería y en el 87 del Frente Democrático, obviamente, pues ya participamos en el 88 y viene la formación del PRD y entonces se inicia el proceso de afiliación. Claro, mi papá inicia entonces a promover, pues el origen del partido.
Juan Carlos Villarreal: ¿Con quién te llevas mejor de tus hermanos?
Arturo Piña: Se llama José Luis. Es mayor que yo, o sea, no el mayor de la familia, pero sí el mayor de los hombres.
Juan Carlos Villarreal: ¿Y él a qué se dedica?
Arturo Piña: Él es profesor. Él les digo que es mi ángel guardián, anda conmigo para todos lados. Él pregunta en dónde estoy todos los días, investiga. Me ha sorprendido que en ocasiones yo estoy en casa y procuro ser celoso, por seguridad, de cosas que voy a hacer, en dónde voy a estar, a qué hora, con quién voy a transitar, ¿cómo le hace él para investigar? No lo sé, pero yo salgo y mi esposa me dice “oye, tu hermano se va contigo, eh” [responde] “¿cómo crees? Si ni sabe dónde voy” y ya está esperando que yo me suba: “voy contigo, carnal”; y es un tipo que siempre está ahí.
Juan Carlos Villarreal: ¿Está dando clases?
Arturo Piña: Sí, imparte clases, está a punto de jubilarse él. Imparte clases en el bachillerato, en la prepa, y es un tipo muy sociable. Creo que yo aprendí muchas cosas de él.
Juan Carlos Villarreal: Si tú definieras a tu hermano, igual si lo presentaras, ¿cómo lo presentarías?
Arturo Piña: Un tipo noble, muy humanista, muy comprometido, apasionado, sociable, un padre muy responsable, un tipo que está siempre al pendiente de toda la familia. Él deja de comer lo que sea, con tal de que el hermano, la hermana, el sobrino tengan algo.
Juan Carlos Villarreal: Oye, y si José Luis te presentara, ¿cómo lo haría?
Arturo Piña: Yo creo que lo haría casi de la misma forma que lo estoy haciendo yo. Crecimos de chavitos juntos, él es mayor que yo por uno o dos años. Crecimos juntos, padecimos juntos, disfrutamos juntos, nos fuimos de parranda juntos.
Él es el responsable de que yo me haya ido a Tenería. Mi padre era albañil y mi madre tenía que, y lo digo con honestidad, lavar ropa ajena para que pudiésemos comer. Somos 11 de familia. Y entonces, para que comieran esos 11 tuvo que desempeñarse en la lavandería, que no es despreciable ni despectivo.
Juan Carlos Villarreal: Pero digamos que ahí tienes una vena importante, porque si pensamos en términos de la población, del total de la población, somos como 16 millones de habitantes en el Estado de México. Pero si preguntáramos a lo que se dedican y los ingresos, yo creo que el 70% ganan menos de 16 mil pesos mensuales, en esa escala, el retrato de tu familia es un retrato común en el Estado de México: un padre que es obrero, que es mecánico, que es auxiliar en algún lugar y la mamá que puede lavar o puede ayudar en una casa, ¿Cómo te marcó a ti eso en tus orígenes y en tu pensamiento? ¿Qué recuerdas?
Arturo Piña: ¿Qué recuerdo? Pues a mi madre trabajando, sufriendo para hacernos llegar la comida; en el rancho, en el medio rural, mucha gente sembraba papas, algo que recuerdo muchísimo, ¿qué esperábamos nosotros como familia? que recolectaran las papas que iban a vender [los dueños de los sembradíos] y cuando ya nos dejaban entrar a los terrenos íbamos con mi mamá a juntar papas para tener para comer. Entonces yo siempre dije que si algún día yo podía hacer algo diferente para que mis hijos vivieran distinto a como yo viví, pues tenía que esforzarme.
Juan Carlos Villarreal: ¿Y cómo hacía las papas tu mamá, te acuerdas?
Arturo Piña: Guisadas así nada más partidas, con chile, con cebolla. Así pues, aceite o fritas, Y mi madre siempre hacía tortillas comal, imagínate, estábamos cuatro o cinco hermanos mayores, el brazo echándole el ojo a la primera tortilla para hacerte el primer taco de las papas.
Juan Carlos Villarreal: ¿Y otra anécdota que te haya marcado?
Arturo Piña: Algo que me marcó mucho, no tenía para ir a hacer el examen, ni siquiera sabía dónde estaba Tenería. En la secundaria un profe que se llama Eusebio, ya en paz descanse, nos daba ciencias sociales, y él decía que Tenería era una escuela para hijos de padres campesinos. Cuando terminó la secundaria estaba un hermano en el seminario y José Luis estaba en la Normal, y mi padre me dijo “oye, hijo, pues qué crees, ya no te toca estudiar, busca chamba porque yo puedo darles estudio”. Y entonces vino a mi memoria que yo pensaba “¿En dónde está Tenería?” pues era un chavo adolescente de 15 años, no había Google como ahorita. Mi tía que aún vive, hermana de mi papá, me prestó 20 pesos para irme. Y voy a Tenería, sí la encuentro y cuando regresó por la tarde, ya sabes, las mamás con la vara “¿en dónde andabas?” [responde] “Fui a buscar una escuela” “¿con quién te fuiste?, ¿solo? ¿Y quién te dio dinero?” “Me prestó mi tía”.
Cuando mi mamá se entera: “¿quieres ser maestro”, yo quería ser abogado, pero pues no había dinero, yo sí quería estudiar. Y entonces mi mamá me da dinero para ir a entregar mi documentación; cuando me fui pues no había mochilas, no había maletas, mi caja 360, las huevo San Juan, 360 huevos y mi mamá cargando mi caja.
Juan Carlos Villarreal: Te fuiste de la casa literalmente, ¿Y cuándo volviste?
Arturo Piña: En diciembre. Llorando solo todos los domingos.
Juan Carlos Villarreal: Si tú recordaras los primeros regaños, las primeras recomendaciones de tu mamá, ¿Qué te decía? ¿O una frase que tú recuerdes de tu mamá?
Arturo Piña: Saluda a tus mayores. Es obligatorio saludar a todo el mundo y a sus padrinos darles la mano, siempre se habla de “usted”, no seas igualado, si no, el jalón de orejas que nunca faltaba.
Juan Carlos Villarreal: ¿Y cómo te ayudó eso? Esas enseñanzas para para administrar las cosas públicas y para administrar el presupuesto público.
Arturo Piña: Te hace que hacer te hace valorar lo que no es tuyo. Porque no sabes que el esfuerzo que hay detrás para que te lo regalen, pero cuando te cuesta a ti hacer todo eso, cuando ves cuánto gana un campesino pues te hace ver valorar el esfuerzo del campesino.
Continuará.